Cambio climático y sensación térmica
No hablemos de lo que nosotros le hacemos al clima, sino de lo que él nos hace a nosotros, porque lo delicado no es el clima, sino la vida.
14/5/10
Unos lo niegan y otros lo aceptan. Pocos lo entienden y menos hacen algo al respecto, como alienta el mensaje de los científicos del clima. Más allá de creer o no, entender es lo importante, o nunca llegaremos a una acción coordinada. Por eso propongo un cambio de enfoque: no hablemos de lo que nosotros le hacemos al clima, sino de lo que él nos hace a nosotros, porque lo delicado no es el clima, sino la vida...
Una cosa es una temperatura elevada y otra bastante distinta es el calor. La diferencia es que el calor es una percepción y, como tal, es subjetivo. La sensación de calor, como las imágenes que vemos, es un producto de nuestros sentidos (termocepción). Fuera de los cuerpos no existen las imágenes por sí solas, y tampoco existe el calor.
Digo esto porque cualquiera podría pensar que el calor sólo sube cuando sube la temperatura, pero no es así y quiero explicar cómo funciona algo que es esencial para la supervivencia de nuestras formas biológicas: armamos nuestra sensación de calor a partir de tres estímulos fundamentales: temperatura, humedad y viento.
Si la temperatura es constante pero la humedad aumenta, tenemos más calor. Si por el contrario, aumenta el viento, sentimos más frío. Esta es una ecuación que conocemos como "sensación térmica", y es algo que los termómetros ignoran por completo, y la mayoría de los detractores del cambio climático también.
El calor más peligroso no es el externo, sino el interno. Afuera puede hacer 10 ºC o 40, pero el interior del cuerpo debe mantenerse estable. Un grado de más ya es fiebre. Tres o cuatro grados más pueden llamar a la muerte.
Al igual que cualquier máquina que esté en funcionamiento constante, nuestro cuerpo se calienta. Si esa energía se quedara dentro del organismo, sería fatal en tan sólo segundos. Por eso, incluso estando sentados sin hacer nada, irradiamos cerca de 37 grados, equivalentes a unos 100 watts o más, dependiendo del tamaño de la persona.
El principal radiador de esta máquina formidable es la piel, aunque la respiración y otros procesos también ayudan. En todos los casos, sin embargo, la estrella protagonista es la humedad, las moléculas de agua que transportan eficientemente el calor desde el interior hacia el exterior.
Los organismos vivos sabemos regular el ritmo al que se liberan esas moléculas, y en nuestro caso llamamos a eso "transpiración", palabra cuya etimología exacta ignoro, pero que seguramente tiene que ver con el término griego "pyros" (fuego) y con el prefijo "trans" (hacia el otro lado). Es decir, transpirar no implica sólo "largar agua por los poros", sino más bien "eliminar calor", lo cual es un proceso indispensable para todo ser vivo.
El perro, por ejemplo, tiene un sistema de trans-piración llamado "jadeo", mediante el cual acelera la evaporación de moléculas de agua de su saliva. Incluso las plantas transpiran a su modo: en lugar de poros en la piel, tienen estomas en las hojas, que liberan gotas de agua al abrirse para respirar.
Gracias a la transpiración controlada, los seres vivos pueden adaptarse a pequeños cambios de temperatura ambiental y así sobrevivir a las estaciones cálidas. Si el Ser Humano no transpirase, simplemente no hubiese sobrevivido a las zonas y épocas más calurosas.
Un aumento de una fracción de grado es suficiente para activar el mecanismo de enfriamiento de la piel e irradiar energía a un ritmo hasta cuatro veces mayor. Pero antes de decidir a qué velocidad eliminará calor, el organismo debe tener en cuenta al viento.
La velocidad del aire es una variable fundamental para que las moléculas de agua de la transpiración sean efectivas. El sudor es sólo un intermediario entre el adentro y el afuera, pero es el aire el que en definitiva aleja el calor del cuerpo cuando evapora el sudor.
Esta influencia puede parecer despreciable, pero puede crear una diferencia muy grande de sensación térmica, que es lo que realmente importa. Lógicamente, cuanto más se mueve el aire, más moléculas calientes se lleva y perdemos temperatura más velozmente. Pero también el aire suele traer sus propias moléculas de agua...
Demasiada humedad en el ambiente evita que el sudor corporal se evapore, como si intentáramos secar la ropa tendiéndola bajo la lluvia, por lo que todo el proceso de enfriamiento pierde efectividad.
Aunque la temperatura global aumente sólo un par de grados -muestran los cálculos-, el organismo humano no podría adaptarse al cambio si la humedad es demasiado alta, porque nos costaría más eliminar calor y aumentaría gravemente muestra sensación térmica.
Y la desgracia es que según las predicciones la temperatura mundial aumentará considerablemente en las próximas décadas, lo suficiente como para generar un cambio en la humedad global, tal como lo viene haciendo desde hace un tiempo. Independientemente de cuál sea la causa, esto no es una buena noticia para nosotros.
De esto es de lo que se habla cuando se dice "cambio climático" en un contexto científico. El "calentamiento global" es sólo una parte de la catástrofe, es la parte que hará que la humedad no pueda condensarse y permanezca en el aire, trayendo calor al cuerpo en lugar de llevárselo, retroalimentando el aumento de la sensación térmica y causando un calentamiento biológico.
Como hemos visto, el aumento de la temperatura también incluye graves problemas psicológicos que afectarían los lazos elementales de la sociedad. A este aspecto del calor se lo llama "comodidad térmica", y, cuando disminuye, disminuye también nuestro rendimiento físico y psíquico.
Lo que mata, es la humedad, hoy más que nunca. Imagínese vivir en un sauna y se entenderá esto con una perspectiva más contundente. Pero imagínese bien real...
Por ejemplo, 30 ºC con un 90% de humedad relativa nos da una sensación térmica de 40 ºC, la cual es mortalmente peligrosa si es prolongada. Para la supervivencia humana, la sensación térmica debe mantenerse por debajo de los 34 ºC (preferentemente entre 16 y 26 grados)1.
Dentro de esos límites, nuestro organismo es capaz de eliminar la misma cantidad de calor que produce y podemos seguir viviendo.
¿Sabías todas estas cosas? El tema es complejo, y ni siquiera hemos tocado aún la parte de las acciones humanas y sus consecuencias.
Teniendo en cuenta todas estas cosas, los últimos informes científicos nos dan una alarma anticipada: el aumento de décimas de grado previsto para los próximos años podría, a largo plazo, llevar la sensación térmica a un nivel insoportable.
En 100 años, gran parte de la Tierra sería inhabitable debido al calentamiento global. Repito: un siglo a partir de ahora, un clima mortal puede apoderarse de la mayor parte de las regiones habitadas del planeta, a menos que de alguna manera la tendencia climática se revierta.
Si bien el planeta no se derretirá, los científicos calculan que queda menos de una década para que el planeta alcance las condiciones necesarias y que tal sensación térmica sea inevitable en el curso de los siguientes 90 años. Y, ya que ninguna otra especie ha formado comités internacionales dedicados a evitar las condiciones previstas, debemos hacerlo nosotros.
¿Cómo? Lo veremos en el próximo capítulo...
Sensación térmica
Una cosa es una temperatura elevada y otra bastante distinta es el calor. La diferencia es que el calor es una percepción y, como tal, es subjetivo. La sensación de calor, como las imágenes que vemos, es un producto de nuestros sentidos (termocepción). Fuera de los cuerpos no existen las imágenes por sí solas, y tampoco existe el calor.
Digo esto porque cualquiera podría pensar que el calor sólo sube cuando sube la temperatura, pero no es así y quiero explicar cómo funciona algo que es esencial para la supervivencia de nuestras formas biológicas: armamos nuestra sensación de calor a partir de tres estímulos fundamentales: temperatura, humedad y viento.
Si la temperatura es constante pero la humedad aumenta, tenemos más calor. Si por el contrario, aumenta el viento, sentimos más frío. Esta es una ecuación que conocemos como "sensación térmica", y es algo que los termómetros ignoran por completo, y la mayoría de los detractores del cambio climático también.
Calor
El calor más peligroso no es el externo, sino el interno. Afuera puede hacer 10 ºC o 40, pero el interior del cuerpo debe mantenerse estable. Un grado de más ya es fiebre. Tres o cuatro grados más pueden llamar a la muerte.
Al igual que cualquier máquina que esté en funcionamiento constante, nuestro cuerpo se calienta. Si esa energía se quedara dentro del organismo, sería fatal en tan sólo segundos. Por eso, incluso estando sentados sin hacer nada, irradiamos cerca de 37 grados, equivalentes a unos 100 watts o más, dependiendo del tamaño de la persona.
El principal radiador de esta máquina formidable es la piel, aunque la respiración y otros procesos también ayudan. En todos los casos, sin embargo, la estrella protagonista es la humedad, las moléculas de agua que transportan eficientemente el calor desde el interior hacia el exterior.
Transpiración
Los organismos vivos sabemos regular el ritmo al que se liberan esas moléculas, y en nuestro caso llamamos a eso "transpiración", palabra cuya etimología exacta ignoro, pero que seguramente tiene que ver con el término griego "pyros" (fuego) y con el prefijo "trans" (hacia el otro lado). Es decir, transpirar no implica sólo "largar agua por los poros", sino más bien "eliminar calor", lo cual es un proceso indispensable para todo ser vivo.
El perro, por ejemplo, tiene un sistema de trans-piración llamado "jadeo", mediante el cual acelera la evaporación de moléculas de agua de su saliva. Incluso las plantas transpiran a su modo: en lugar de poros en la piel, tienen estomas en las hojas, que liberan gotas de agua al abrirse para respirar.
Gracias a la transpiración controlada, los seres vivos pueden adaptarse a pequeños cambios de temperatura ambiental y así sobrevivir a las estaciones cálidas. Si el Ser Humano no transpirase, simplemente no hubiese sobrevivido a las zonas y épocas más calurosas.
Viento
Un aumento de una fracción de grado es suficiente para activar el mecanismo de enfriamiento de la piel e irradiar energía a un ritmo hasta cuatro veces mayor. Pero antes de decidir a qué velocidad eliminará calor, el organismo debe tener en cuenta al viento.
La velocidad del aire es una variable fundamental para que las moléculas de agua de la transpiración sean efectivas. El sudor es sólo un intermediario entre el adentro y el afuera, pero es el aire el que en definitiva aleja el calor del cuerpo cuando evapora el sudor.
Esta influencia puede parecer despreciable, pero puede crear una diferencia muy grande de sensación térmica, que es lo que realmente importa. Lógicamente, cuanto más se mueve el aire, más moléculas calientes se lleva y perdemos temperatura más velozmente. Pero también el aire suele traer sus propias moléculas de agua...
Humedad
Demasiada humedad en el ambiente evita que el sudor corporal se evapore, como si intentáramos secar la ropa tendiéndola bajo la lluvia, por lo que todo el proceso de enfriamiento pierde efectividad.
Aunque la temperatura global aumente sólo un par de grados -muestran los cálculos-, el organismo humano no podría adaptarse al cambio si la humedad es demasiado alta, porque nos costaría más eliminar calor y aumentaría gravemente muestra sensación térmica.
Y la desgracia es que según las predicciones la temperatura mundial aumentará considerablemente en las próximas décadas, lo suficiente como para generar un cambio en la humedad global, tal como lo viene haciendo desde hace un tiempo. Independientemente de cuál sea la causa, esto no es una buena noticia para nosotros.
Cambio climático
De esto es de lo que se habla cuando se dice "cambio climático" en un contexto científico. El "calentamiento global" es sólo una parte de la catástrofe, es la parte que hará que la humedad no pueda condensarse y permanezca en el aire, trayendo calor al cuerpo en lugar de llevárselo, retroalimentando el aumento de la sensación térmica y causando un calentamiento biológico.
Como hemos visto, el aumento de la temperatura también incluye graves problemas psicológicos que afectarían los lazos elementales de la sociedad. A este aspecto del calor se lo llama "comodidad térmica", y, cuando disminuye, disminuye también nuestro rendimiento físico y psíquico.
Lo que mata, es la humedad, hoy más que nunca. Imagínese vivir en un sauna y se entenderá esto con una perspectiva más contundente. Pero imagínese bien real...
Por ejemplo, 30 ºC con un 90% de humedad relativa nos da una sensación térmica de 40 ºC, la cual es mortalmente peligrosa si es prolongada. Para la supervivencia humana, la sensación térmica debe mantenerse por debajo de los 34 ºC (preferentemente entre 16 y 26 grados)1.
Dentro de esos límites, nuestro organismo es capaz de eliminar la misma cantidad de calor que produce y podemos seguir viviendo.
¿Sabías todas estas cosas? El tema es complejo, y ni siquiera hemos tocado aún la parte de las acciones humanas y sus consecuencias.
Teniendo en cuenta todas estas cosas, los últimos informes científicos nos dan una alarma anticipada: el aumento de décimas de grado previsto para los próximos años podría, a largo plazo, llevar la sensación térmica a un nivel insoportable.
En 100 años, gran parte de la Tierra sería inhabitable debido al calentamiento global. Repito: un siglo a partir de ahora, un clima mortal puede apoderarse de la mayor parte de las regiones habitadas del planeta, a menos que de alguna manera la tendencia climática se revierta.
Si bien el planeta no se derretirá, los científicos calculan que queda menos de una década para que el planeta alcance las condiciones necesarias y que tal sensación térmica sea inevitable en el curso de los siguientes 90 años. Y, ya que ninguna otra especie ha formado comités internacionales dedicados a evitar las condiciones previstas, debemos hacerlo nosotros.
¿Cómo? Lo veremos en el próximo capítulo...
genial el artículo... y me encanta la publicidad que aparece al final del artículo (aire acondicionado LG)
ResponderEliminarSaludos!!!
Nos mudamos todos a la patagonia....y problema solucionado, despues mis nietos se comen el garron, ja.
ResponderEliminarHabría que hacer una pantalla solar gigante de cara al sol, así tenemos energía barata y gratis y nos cagamos de frío. Ahora sí, la factura de gas, pagala vos xD
ResponderEliminarMuy buen artículo, esperando la tercera entrega...
ResponderEliminar(a los comentaristas anteriores: muchachos un poco de seriedad, justamente el artículo dicta que no es joda todo esto)
Resumen de un Articulo de prensa...
ResponderEliminar....De miligro vivimos. Se dice, y la ciencia lo apoya que un meteorito gigante destruyo para siempre la continuidad de los gigantes de la tierra, y de los humildes mamiferos sobrevivientes emergieron los ancestros del hombre. Estamos aqui de milagro. Casi podriamos decir que gracias a la hecatombe pudo ver luz la vida humana
Toda la vida se gesto en la crisis como si todos los seres de la tierra tuvieran surgir de la matriz de la tormenta. Quien creeria que el oxigeno que hoy respiramos fue un gas letal para la vida primitiva, o quien de nosotros habria imaginado el calcio excedente en el mar interior del plasma fue la clave para construir el esqueleto de una vida que habria de levantarse para desafiar la gravedad.
La Nuestra es una crisis de humanidad, una crisis de sentido. Hemos perdido el horizonte de la vida y confundido la libertad de vivir con el libertinaje de hacer lo que queremos...
.- Ojala y este rollo se termine pronto, que el apocalipsis toque nuestra puerta de una vez, el hombre no es digno de tanta amabilidad divina, de tanta belleza natural, no merecemos lo que no cuidamos-.
...No es cuestion de culpa si no de responsabilidad...
Hola, estoy de acuerdo con la esencia de la nota respecto a la importancia del cambio climático y sus consecuencias.
ResponderEliminarIgual quisiera aclarar que hay una confusión con respecto a la humedad (humedad relativa) en verdad lo que juega en la variable humedad relativa es el punto de rocio (a que temperatura debe enfriarse el aire para que se condense), que está asociado a la presion atmosferica, cuanto menor presión (asociada al calor) el aire se expande y permite que haya más vapor de agua y cuanto más pequeña la diferencia entre la Temperatura y el Punto de rocío mas humedad relativa hay (ej la selva tropical T 35° Pr 30°) y a mayor diferencia menos humedad (desierto como ejemplo T 35° Pr 5°). La Humedad relativa se calcula a partir de una formula no de un instrumento.
Otra aclaración es tener en cuenta que el clima que nos rodea y que nos afecta directamente, ejemplo la ciudad de Buenos Aires, tiene variaciones por factores propios, su ceranía al río, etc, pero el cambio del clima y su estado se debe a factores que se forman a miles de kilómetros, por ejemplo, en el sur del Pacífico donde hay un centro de alta presión semiestacionario que funciona como gran "ventilador" que por el efecto rotacion de la tierra y Coriolis se va curvando y dirigiendose hacia el noroeste pasando por las cordillera hasta llegar al atlántico afectando la ciudad de Bs As.
Otro ejemplo son los huracanes del sur de EEUU, los mismos se forman en el norte de Africa sobre el atlantico, son centros de baja presion que van tomando fuerza al no encontrar ningún obstáculo y tambien por el efecto de rotacion y Coriolis se dirigen hacia el este.
Con lo antedicho quiero hacer notar que en verdad un cambio de temperatura en el planeta tal vez pueda incidir en el cambio de las ubicaciones de esos centros de alta presion y baja presion, que es lo que provoca los cambios de clima, pero esto esta dicho sin ninguna base cientifica sino a modo de observacion.
Sería bueno que se escriba una nota sobre como funciona el clima en el mundo y que es lo que rige los cambios del tiempo
gracias
saludos
otro ejemplo es lo ocurrido en Francia hace algunos años, donde un verano caluroso, afecto gravemente a los habitantes, principalmente ancianos que sufrieron golpes de calor y abarrotaron los servicios de urgencias, el número de muertos fue muy alto, ademas de los casos de deshidratación severa, en este tipo de eventos la población más afectada son los niños y ancianos que ven afectado su termo-regulación, y les cuesta más trabajo que su cuerpo adapte sus procesos a estas condiciones prolongadas. No sólo se trata del clima como bien lo menciona el articulo, el ámbito social,se vería seriamente afectado, puesto que ya existe un problema de sobrepoblación hospitalaria a nivel mundial, falta de recursos económicos y humanos, situaciones de pobreza, falta de agua para consumo humano, desnutrición, factores que influyen en las condiciones de la vida cotidiana, otra pequeño engrane de la maquinaria que se afectaría, recordemos que entre más complejo el sistema, más susceptible se vuelve.
ResponderEliminar¿¿¿Qué pasó con lo de.. "añade aquí tu comentario sin faltas de ortografía"???
ResponderEliminarGrande Ayreonauta!!!!!!
cuando tomaremos conciencia? quizà cuando sea demasiado tarde.... ojalà que la semilla aquì depositada germine y fructifique en cada uno de nosotros.... que estamos leyendo esta informaciòn....haz algo tù ....ahora!!!!!!!
ResponderEliminarPor estas razones yo estoy estudiando arduamente, y no me voy a detener
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