Escribo a las apuradas porque me enteré de que hoy se celebra en Argentina el Día del Pensamiento Nacional. Pocos lo saben y pocos lo necesitan, ya que saberlo, en sí mismo, no conduce a nada. Para que sirva, hay que pensarlo, es decir, examinarlo con detenimiento. Mi primer pensamiento al respecto es: no es el Día Nacional del Pensamiento, que sería mucho mejor; es el Día del Pensamiento Nacional.

Ojalá fuera el Día del Pensamiento a secas, ya que si hubiera un pensamiento distinto por cada nación, tendríamos un grave problema. El pensamiento no es un color que se elige para una bandera ni un menú de platos típicos. El pensamiento es la búsqueda de la verdad.

Decir "pensamiento nacional" no es más que acotar esta búsquedao, pretender que la verdad está en un lugar y no en otro. Podemos celebrar algunos grandes pensamientos nacionales, sí... O podemos pensar.

Pensar no es resolver crucigramas o sudokus. La ciencia no es distinta en esto: sólo enfrenta crucigramas y sudokus más complejos. "Dos más dos es cuatro" no es un pensamiento. Un pensamiento sólo es tal cuando hace pensar más, cuando se está pensando, no cuando se ha llegado a una conclusión (esa es la parte peligrosa).

Pero si estás esperando que te diga exactamente qué es pensar o cómo se piensa o tan siquiera que te dé un ejemplo de pensamiento, no estás pensando. El mayor reto que tuvieron los pensadores de la Historia fue tratar de saber qué es el pensamiento, y los más grandes admitieron su fracaso.

No hay nada más misterioso. Ni los agujeros negros ni el tiempo ni la espuma cuántica ni nada conocido o por conocer es un misterio tan grande como el pensamiento que piensa todas esas cosas.

Podemos hablar de todo eso en otro momento porque hoy se me acaba el tiempo y es la oportunidad la que dicta este post y exige su publicación. Pero una cosa es segura: sin pensamiento, vivirías en una caverna y yo te estaría lanzando un gruñido. O quizá eso es lo que está pasando, con un mínimo refinamiento, como lo sospecha Neil deGrasse Tyson...



El negro estaba pensando, sin dudas. Pero en sus palabras no hay pensamiento. El pensamiento no se puede transmitir, porque es un proceso. Podemos hablar de preguntas y de respuestas, pero no de lo que en el medio ocurre ni de dónde emergen. Sin embargo, sus palabras nos pueden haber ayudado a pensar algo, cualquier cosa.

Así que, sin más tiempo ni pretensiones, te abandono a tu suerte con estas 10 frases. Si sólo una te hace pensar, lo notarás porque tardarás años en entenderla.

1. Pensar es el trabajo más difícil que existe. Quizá sea esta la razón por la que haya tan pocas personas que lo practiquen. Henry Ford
2. El trabajo del pensamiento se parece a la perforación de un pozo: el agua es turbia al principio, mas luego se clarifica. Proverbio chino
3. Pensar es decir no. Reflexionar es negar aquello que creemos. Emile Chartier Alain
4. El pensamiento es la única cosa del Universo de la que no se puede negar su existencia: negar es pensar. José Ortega y Gasset
5. Toma lo mejor de cada pensamiento, no pienses si es correcto o no, no estés a favor ni en contra. Bruce Lee
6. Una palabra bien elegida puede economizar no sólo cien palabras sino cien pensamientos. Henri Poincaré
7. El lenguaje también puede corromper el pensamiento. George Orwell
8. El pensamiento son las riendas, y los sentimientos, los caballos. Platón
9. Quien vive sin pensar no puede decir que vive. Pedro Calderón De La Barca
10. Usted no piensa, se limita a ser lógico. Niels Bohr