Las estaciones del año (¿por qué hay cuatro?)
Australia podría llegar a ser el primer país en tener seis estaciones del año, en lugar de cuatro. Y la idea tiene todo el sentido del mundo.
23/8/09
Hoy me enteré de que Australia podría llegar a ser el primer país en tener seis estaciones, en lugar de cuatro. Esta posibilidad fue sugerida por el respetado científico Tim Entwistle, jefe del Jardín Botánico Real, quien asegura que tan sólo cuatro estaciones no son suficientes para reflejar los cambios climáticos de la región. Los gritos de "cállate, estúpido" no se hicieron esperar. Pero démosle una oportunidad...
Dice este científico australiano que el sistema estacional que usamos es un acto arbitrario y de poca utilidad para su país. Argumenta a su favor recordando que algunos aborígenes australianos tienen entre 6 y 8 estaciones anuales, lo cual les permite anticipar el clima y llevar a mejor cabo sus actividades de cacería y agricultura.
Por otro lado -aunque sospecho que sólo para crear un poco de controversia-, Entwistle alega que el sistema cuadriestacional es una herencia imperialista, impuesta por Inglaterra durante la colonización.
Puede que en esta ocasión Australia no se salga con la suya, pero me gustó la noticia porque no cualquiera se replantea algo tan elemental y cotidiano.
Hay varios puntos para objetarle al científico australiano, y de eso ya se encargó sin piedad la prensa y los sabelotodos que abundan en Internet (y también lo haría Vivaldi, si estuviese vivo). Pero toda esta gente en realidad no se tomó ni 10 segundos para pensar lo que dice...
Y es que Entwistle no podría tener más razón: no hay necesidad de que haya cuatro estaciones, así que haré de abogado del diablo, para variar.
Nuestras cuatro estaciones responden a eventos astronómicos, como se muestra en el gráfico superior (corresponde al hemisferio sur). Esta es la explicación:
Pero no hay una razón para basar las estaciones exclusivamente en estos acontecimientos solares. Después de todo, utilizamos la posición de la Tierra con respecto al Sol sólo para hablar indirectamente de las diferentes temperaturas que en ella hay a cada instante.
De hecho, en las ciudades cercanas al ecuador hay sólo dos estaciones, independientemente de lo que diga el calendario... Porque, sencillamente, allí siempre hace el mismo calor; lo que varía es la lluvia.
Es el clima lo que influye en los ciclos de la flora y la fauna, y dado que el clima depende no sólo del Sol, si no de múltiples factores y chimeneas, sería mucho más preciso un sistema estacional basado en la temperatura, siempre y cuando fuera predecible.
Otra alternativa sería directamente observar la migración de los animales, especialmente de las aves, que si bien a grandes rasgos corresponden con los solsticios y equinoccios, cada vez se desfasan más por el calentamiento global, la destrucción de sus hábitat y el desplazamiento de los campos magnéticos terrestres.
Pero lo fundamental a tener en cuenta es que invierno, verano, otoño y primavera no son más que cuatro nombres distintos para una misma unidad de medida arbitraria: un cuarto de año, así como la hora es 1/24 del día, así porque a alguien se le antojó.
Todas nuestras unidades de medida son arbitrarias. El metro, por ejemplo, está definido nada más que por la distancia que recorre la luz en 3,34ns; el litro es sólo el espacio que ocupa un kilogramo de agua, siendo el kilo a su vez lo que pesa una barrita de metal que hay en Francia... El verano, del mismo modo arbitrario, es simplemente el momento entre un solsticio y un equinoccio, es decir, el 1/4 más caluroso del año (en teoría).
Nadie dice que haya que reformular cuánto dura o dónde está el verano, pero tampoco hay necesidad de usar esa unidad de medida sí o sí, y creo esto es lo que no entiende la fuerte crítica a la que se enfrentó Entwistle.
¡Este científico tiene razón! En Australia, las estaciones actuales son unidades de medida que no pueden medir bien los cambios del ecosistema. Sería como si de repente los taxis cobraran por año luz en lugar de por metro (lo cual en Argentina vienen haciendo desde hace tiempo).
En fin... el cambio que propone no es un simple capricho, no es rebeldía, se trata de mejorar algo arcaico y poco práctico. Seguramente nadie le preste demasiada atención a este científico que no sólo abrió los ojos si no también la boca, pero al menos habrá un precedente para un nuevo pensamiento, uno que se cuestione la utilidad de las ideas heredadas y se atreva a contradecir miles de años de tradición arbitraria.
Australia quiere 6 estaciones al año
Arbitrariedad: f. Acto contrario a la razón, a las leyes o a la justicia.
Dice este científico australiano que el sistema estacional que usamos es un acto arbitrario y de poca utilidad para su país. Argumenta a su favor recordando que algunos aborígenes australianos tienen entre 6 y 8 estaciones anuales, lo cual les permite anticipar el clima y llevar a mejor cabo sus actividades de cacería y agricultura.
Por otro lado -aunque sospecho que sólo para crear un poco de controversia-, Entwistle alega que el sistema cuadriestacional es una herencia imperialista, impuesta por Inglaterra durante la colonización.
Puede que en esta ocasión Australia no se salga con la suya, pero me gustó la noticia porque no cualquiera se replantea algo tan elemental y cotidiano.
Hay varios puntos para objetarle al científico australiano, y de eso ya se encargó sin piedad la prensa y los sabelotodos que abundan en Internet (y también lo haría Vivaldi, si estuviese vivo). Pero toda esta gente en realidad no se tomó ni 10 segundos para pensar lo que dice...
Y es que Entwistle no podría tener más razón: no hay necesidad de que haya cuatro estaciones, así que haré de abogado del diablo, para variar.
¿Por qué tenemos 4 estaciones?
Nuestras cuatro estaciones responden a eventos astronómicos, como se muestra en el gráfico superior (corresponde al hemisferio sur). Esta es la explicación:
- en el solsticio de verano (21 de Diciembre) comienza el verano porque la luz del Sol da justo sobre el Trópico de Capricornio, que es el centro del hemisferio sur;
- el 21 de junio comienza el invierno porque es el punto en que más lejos pega el Sol, en el centro del otro hemisferio, el Trópico de Cáncer.
- las otras dos estaciones comienzan cuando el Sol enfrenta directamente al Ecuador: el otoño cuando el Sol comienza su marcha por el hemisferio opuesto y la primavera cuando vuelve al sur.
Pero no hay una razón para basar las estaciones exclusivamente en estos acontecimientos solares. Después de todo, utilizamos la posición de la Tierra con respecto al Sol sólo para hablar indirectamente de las diferentes temperaturas que en ella hay a cada instante.
De hecho, en las ciudades cercanas al ecuador hay sólo dos estaciones, independientemente de lo que diga el calendario... Porque, sencillamente, allí siempre hace el mismo calor; lo que varía es la lluvia.
Otros pensamientos, otras posibilidades
Es el clima lo que influye en los ciclos de la flora y la fauna, y dado que el clima depende no sólo del Sol, si no de múltiples factores y chimeneas, sería mucho más preciso un sistema estacional basado en la temperatura, siempre y cuando fuera predecible.
Otra alternativa sería directamente observar la migración de los animales, especialmente de las aves, que si bien a grandes rasgos corresponden con los solsticios y equinoccios, cada vez se desfasan más por el calentamiento global, la destrucción de sus hábitat y el desplazamiento de los campos magnéticos terrestres.
Pero lo fundamental a tener en cuenta es que invierno, verano, otoño y primavera no son más que cuatro nombres distintos para una misma unidad de medida arbitraria: un cuarto de año, así como la hora es 1/24 del día, así porque a alguien se le antojó.
Todas nuestras unidades de medida son arbitrarias. El metro, por ejemplo, está definido nada más que por la distancia que recorre la luz en 3,34ns; el litro es sólo el espacio que ocupa un kilogramo de agua, siendo el kilo a su vez lo que pesa una barrita de metal que hay en Francia... El verano, del mismo modo arbitrario, es simplemente el momento entre un solsticio y un equinoccio, es decir, el 1/4 más caluroso del año (en teoría).
Nadie dice que haya que reformular cuánto dura o dónde está el verano, pero tampoco hay necesidad de usar esa unidad de medida sí o sí, y creo esto es lo que no entiende la fuerte crítica a la que se enfrentó Entwistle.
¡Este científico tiene razón! En Australia, las estaciones actuales son unidades de medida que no pueden medir bien los cambios del ecosistema. Sería como si de repente los taxis cobraran por año luz en lugar de por metro (lo cual en Argentina vienen haciendo desde hace tiempo).
En fin... el cambio que propone no es un simple capricho, no es rebeldía, se trata de mejorar algo arcaico y poco práctico. Seguramente nadie le preste demasiada atención a este científico que no sólo abrió los ojos si no también la boca, pero al menos habrá un precedente para un nuevo pensamiento, uno que se cuestione la utilidad de las ideas heredadas y se atreva a contradecir miles de años de tradición arbitraria.
Casualmente (?), hace unos dias pensaba en que el otoño tiene aspecto de ser una estación más fria que la primavera y sin embargo, si uno lo analiza desde el punto de vista astronómico no tiene sentido, deberían ser iguales. Entonces concluí en que mi concepto "más frio" o "más cálido" es erróneo, o lo son las decisiones del Ente Regulador de Estaciones Planetarias (EREP) que en este comentario estoy fundando (¿?¿?¿?).
ResponderEliminar"y también lo haría Vivaldi", "múltiples factores y chimeneas", son frases que me gustaron especialmente. Excelente artículo, me alegro Ayreonauta que te hayas recuperado del brote bromista (aunque estuvo bueno que nos sorprendieras).
Más allá de ésto, dicen que el calendario maya es infinitamente más efectivo que el gregoriano que tenemos en uso. Yo no sé, escuché decir eso, pero no me sorprendería que fuera así. No sé cuántas estacion es tendríamos de ponerlo en práctica, si es que tiene algún sentido hablar de estaciones.
Salud!!
No es tan erróneo tu [pre]concepto. Veamos: por un lado, el gráfico está simplificado, en realidad el Sol no está en el centro si no ligeramente corrido hacia la derecha, como seguramente sabes. Eso hace que el otoño reciba menos calor que la primavera. Pero más importante es que en realidad el otoño es un acercamiento de tres meses hacia el punto más frío del año, el invierno, mientras que la primavera es un calentamiento progresivo, un viajar hacia el verano, lo cual es otra razón para que ambas pseudoestaciones no tengan la misma temperatura. Pero en el cachito de tierra que nos tocó para vivir, no hay ley que se cumpla. Mi ciudad tiene nueve meses de invierno, uno de primavera-verano, uno de otoño-invierno y uno de verano.
ResponderEliminarMe encanta cuando contradecís cosas tan comunes...
ResponderEliminarAlucino...
taria bueno q agreguen o saquen o cambien las estaciones, las cuatro de ahora ya me aburren pero todavia no le encuentro una la utilidad digo el clima va a ser siempre el mismo ademas esta el servicio meteorologico para saber como viene el clima
ResponderEliminarfrase: "Una clara alternativa al desastre petrolífero sigue siendo la catástrofe nuclear."
"Frontera: dícese del lugar donde termina una locura y empieza otra."
"La bondad es un trastorno de la personalidad."
"El pastor era el lobo." (Le dice una oveja a otra en el matadero).
"¡Qué bien vivimos! ... Si es que a esto se le puede llamar vida..."
todas son de "El Roto" (Madrid, España, 1947 - ) es un humorista gráfico
Las 4 estaciones marcan solamente los momentos del año en que los rayos del sol "caen" perpendicularmente sobre Trópico de Capricornio - Ecuador - Trópico de Cáncer- Ecuador - Trópico de Capricornio - Ecuador - Trópico de Cáncer- Ecuador......... Son como las estaciones en una vía ferroviaria: siempre están en el mismo lugar, con el mismo cartel, aunque cambien los pasajeros, a veces no funcione la calefacción, suba el precio del boleto o aumente la cantidad de vidrios rotos que tengan los vagones.
ResponderEliminarY lo que mata es la humedad.
La comparación que hice es confusa. Las estaciones del año son el recorrido entre las estaciones "Solsticio de Invierno" y "Equinoccio de primavera" etc...
ResponderEliminarLinda analogía, Marina. También revelaste sin querer lo engañoso de la palabra estación en este contexto, que sugiere quietud... Yo no veo las horas de que paremos en Verano, así me bajo a fumar un cigarrillo...
ResponderEliminar¡NO!!!! ¡Fumar es perjudicial para la salud!!!! Bajáte a estirar las piernas!
ResponderEliminarY tomar ayre.
ResponderEliminarO nauta
ResponderEliminarMarina, inso, como miembro número uno de este clan, les ordeno que se aniquilen mutuamente. De ser posible, incriminen a saibot, que estaba arriba y vio todo.
ResponderEliminarA Marina la puedo facilmente, dos bifes y se termina todo. Con Saibot no sé...imagino que debe ser un gordo buscacitas..., cabezón y feo, con él mejor no meterse.
ResponderEliminarPero es que esa orden es un desorden, soy pacífico.
Yo. mejor, huyo en el tren que me lleva al otoño del 2010.
ResponderEliminarpues en donde vivo las estaciones tampoco nos funcionan (las del año, ni las de tren, ni de autobus..) porque hay 8 o 9 meses de calor, 1 de invierno (q no creo q pueda llamarsele inverno.. mas bien otoño ligeramente mas frio), 1 de otoño, pero las hojas no se caen asi q ni paisajes bonitos ni nada y 1 de primavera, que hace casi tanto calor como en verano, pero hay florecitas y mariposas... si, señoras y señores.. asi nos la pasamos aki en medio del desierto.. u_u
ResponderEliminarahhh!! pude comentar!! no lo puedo creeeeer!! hace meses q lo intento y me marcaba error!! woooow!! mis elocuentes palabras ya no estaran en el olvido xD
ResponderEliminar¿Y por qué no lo dijiste antes? XD
ResponderEliminarBienvenida ;)
muy bien ,,, interesante
ResponderEliminarYo creo que las cuatro estaciones de Vivaldi, perdón, las cuatro estaciones del año, sí que tienen sentido: en cuanto a las horas de luz solar.
ResponderEliminarDentro de los trópicos ya me pierdo, pero fuera de los trópicos, está claro que los solsticios son los días en que menos o más horas de luz hay en un mismo sitio, y los equinoccios son aquellos sitios en los que hay igual de luz que de oscuridad. Esto sí que va a misa, así por ejemplo el verano de París va desde el día con más horas de luz solar hasta un día con igual luz que oscuridad.
¿Me explico?
Ah, y si tal como decís, en otoño la tierra está más lejana del sol que en primavera, entiendo por el contexto, que os referís al del hemisferio sur. ¿Quiere esto decir que si hablamos del hemisferio norte podemos decir que en otoño la tierra se halla más cerca del sol?
ResponderEliminarNo lo he entendido bien,
gracias.
Si de proporción de luz y oscuridad se trata, sería mucho más exacto tener 365 estaciones anuales. El tema, Anónimo, es por qué cuatro y no seis o cualquier otra cifra que ayude a medir otros aspectos además de la luz. Por ejemplo, si decidiéramos tener doce estaciones, simplificaríamos mucho las cosas porque coincidirían con los meses (o podríamos tener sólo cuatro meses de 91 días, y el efecto sería el mismo).
ResponderEliminarEn cuanto a la distancia, es un tema bastante confuso, pero espero poder aclararlo aunque sea un poco: nunca dije que la Tierra estuviera más lejos del Sol en otoño. Lo que sí está más lejos en otoño es el hemisferio en el cual es otoño. El hemisferio sur, por ejemplo, comienza a alejarse del Sol cuando empieza esa estación. En ese mismo momento, las ciudades del norte se empiezan a acercar al Sol, y por eso dicen que llegó la primavera. Estos alejamientos y acercamientos no tienen nada que ver con la elipse que dibuja la Tierra alrededor del Sol, si no con su inclinación, como se ve en el gráfico (si la órbita de la Tierra fuera perfectamente circular, aún tendríamos las estaciones tal cual son, excepto que los veranos del sur serían igual de cálidos que los del norte).
Corrijo: en el último paréntesis quise decir que "si el Sol estuviera perfectamente centrado dentro de la órbita de la Tierra".
ResponderEliminarMuchas gracias por contestar.
ResponderEliminarEs decir, que el sol al no estar en el centro de la órbita de la tierra, por lo que deduzco, la tierra está más cercana a él cuando es verano en el hemisferio norte que cuando es verano en el sur. Es decir, que está más cerca cuando el sol da directamente sobre el trópico de cáncer que cuando da directamente sobre el trópico de capricornio.
¿Querría decir esto que el invierno europeo es más frío que el invierno argentino a la vez que el verano europeo más caluroso que el verano argentino?
Dios mío, qué interesante.
Ana.
Exactamente, Ana.
ResponderEliminarGracias, muy interesante.
ResponderEliminarAna.
a ver si va a ser mentira que la tierra se mueve alrededor del sol, otra imposición más del imperialismo occidental. ¿Qué dicen los aborígenes australianos al respecto? Si es que hay gente pa tó! Por cierto, hace un bonito día otoñal en La Mancha, perdón, primaveral en Australia, bueno, biestacional en los trópicos, ay qué lío!!!
ResponderEliminarHola a todos. No puedo evitar dejar un comentario, pues me parece que alguien al leer los otros comentarios podría confundirse. Lo que marca las estaciones (a nivel global) es el ángulo con que inciden los rayos del sol en un hemisferio, no lo cerca o lejos que esté el sol o si se va acercando o alejando. Si los rayos "caen" perpendiculares hace más calor que si "caen" oblicuos, y esta variación en la inclinación es debido a que el eje terrestre está inclinado. Al igual que pasa a lo largo de un día, cuanto más "alto" veamos al sol, es decir, cuanto más perpendicular esté el sol, más calor hace, porque la atmósfera disipa: si los rayos tiene que atravesar más distancia dentro de la atmósfera llegan con menos energía a la tierra.
ResponderEliminarEn el hemisferio norte es verano cuando más lejos estamos del sol, cosa que suele sorprender. De todas formas, lo de lejos y cerca es prácticamente ridículo: la distancia más próxima al sol es de 147,5 millones de km y la más lejana es de 152,6 millones de km. Diferencia que los rayos solares (atravesando el espacio prácticamente vacío) no notan.
Que en algunos sitios no sirva dividir en 4, puedo estar de acuerdo.
Me impresiono mucho toda la informacion, la verdad que no tenia la mas palida idea de que el invierno, verano, primavera y otoño daba lo mismo en los paises ecuatorianos, asi que en cambio ellos tienen estacion seca y de lluvias, debe ser algo que se olvidaron de mencionar en las clases de geografia en la escuela...
ResponderEliminarMe encanto el foro y ojala a la larga le den la razon a ese cientifico, porque no es necesario basarse en un principio de medicion ambiental y climatologico tan antiguo para todos los paises, ya que en algunos (Claro ejemplo de Australia) Es totalmente irrelevante.
"Todo lo creado por el hombre es imperfecto, y jamas sera absoluto..."
Si dibujan la gráfica que representa las horas de luz a lo largo del año obtendrán un periodo completo de la función seno, con mayor o menor amplitud acorde a la latitud del lugar. En esta gráfica hay cuatro puntos singulares: un máximo, un mínimo y dos puntos de inflexión que corresponden con los solsticios y los equinoccios. Supongo que los cambios más grandes en los ecosistemas a escala humana vienen marcados por esos momentos. Me cuesta imaginar que alguna otra peculiaridad geográfica determine cambios climáticos o biológicos tan singulares a los ojos humanos como para distinguir más de cuatro estaciones.
ResponderEliminarTambién depende del estilo de vida y sus muchas influencias, no sólo de la luz, aunque estén ligadas (pero no solapadas). Una comunidad podría tener una estación lluviosa al año, una de sequía, una de vientos, dos de recolección de frutos de una planta en particular, una de recolección de huevos de aves migratorias, una de orgía con la comunidad vecina para dar a luz en el momento óptimo del año, media de cacería de lobos cuando se convierten en amenaza para el ganado, nueve estaciones lunares distintas cada 29 días, un octavo de temporada anual de lago que se convierte en sal, 730 fases de la marea, etc. El punto es que las estaciones son humanas, no solares, y no tiene caso buscar una verdad absoluta al respecto. Toda regla puede subdividirse indefinidamente de acuerdo a las necesidades de medición.
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