Viviendo a unos mil metros de profundidad en el mar, ¿quién necesita un cráneo opaco? Total, nadie te va a ver ni a reclamar nada. Un extraño pez se dio cuenta de este hecho y decidió tener la cabeza transparente, tan transparente que se le ven los órganos internos, y hasta se los puede ver él mismo. Otro animalito para sumar a la lista de "lo quiero de mascota", junto con el animal inmortal...


Este pez de unos 15 centímetros de largo se descubrió en los años 40, pero recién ayer se pudo filmar con detalle y aprender un poco más sobre él, y por eso hablo hoy de esto. Los científicos dicen que se llama Macropinna Microstoma, pero como dudo bastante que le guste ese nombre, voy a llamarlo MaMi, para no perder la costumbre de abreviar.

Su cráneo, como se observa en el video de más abajo, no es de hueso, ni siquiera de carne, si no de una película transparente de material desconocido, aunque se sabe que es bastante frágil ya que este espécimen ha sido el único encontrado con el cráneo intacto. Parece que hasta los otros peces se ven tentados a meterle el dedo para ver de qué se trata...



La cabeza transparente no es lo único extraño que tiene MaMi, por supuesto. Si yo tuviera la cabeza transparente, lo primero que querría hacer sería ¡mirar para adentro! MaMi puede hacerlo, ya que sus ojos pueden girar 360º en cualquier dirección porque que flotan en un extraño líquido dentro del traslúcido cráneo. Sí, se da todos los gustos y sin remordimientos.

Los puntos oscuros que se ven en el video, sorprendentemente, no son los ojos (esos son fosas nasales). Los ojos están detrás, y son las dos esferas verdes que se señalan en la foto de abajo. Al estar en esa posición, los ojos le confieren al animal una visión única en toda la naturaleza, mayor que la del camaleón, por ejemplo, ya que éste no puede mirar lo que está comiendo.

Lo ojos flotan libremente dentro del cráneo y le permiten ver el interior del mismo, aunque su verdadera utilidad es la de detectar rápidamente a sus depredadores, aunque también se cree que los utilizan para escabullirse dentro de las cuevas de otros animales acuáticos, robarles la comida y al final escapar marcha atrás a gran velocidad sin tener que girar la cabeza.

Son los ojos, de hecho, la razón por la cual su cabeza es transparente. A esas profundidades en las que habita, la luz escasea y la evolución hace todo lo que puede para que sus criaturas puedan ver. Como para negar después la inteligencia de la naturaleza...

No tengo mucho más qué decir. Hay otro video y más información en National Geographic (en inglés), aunque la noticia todavía es demasiado nueva como para hallar algo interesante.